sábado, 28 de agosto de 2010

Por San Agustín, San Seacabó

Sanseacabó.
Ya no quiero escribir más de mi entorno.
Y lo mismo que un día de San Agustín empecé este blog, un día de San Agustín toca finiquitarlo.
Tras dos años de posts más o menos regulares, en vez de sentirme mejor cada vez estoy más "encbronao" como acertadamente me comentó Justo.
El hecho de escribir te obliga a estudiar más a fondo las actuaciones en la ciudad con lo cual el cabreo es mayor que si solamente lo ves de refilón y te "haces el tonto".
De hecho tenía preparado varios santos más que me hubieran dado mucho juego literariamente (San Bretón Torrón, Sant Ívoli, San Tó Soterrao, San Monte Cantabria y sus concursos, Santa Cubierta de Abastos, etc, etc) pero que me han irritado tanto según los iba componiendo en el borrador que he decidido tirar el teclado a la basura.
Llevo como arquitecto en Logroño 22 años, en los cuales he visto decenas de "ocasiones perdidas". Creo que hay que hacer cosas, pero hay que hacerlas bien. En este tiempo la ciudad se ha duplicado en tamaño y lamento que se hayan perdido tantas ocasiones para dejar a nuestros descendientes una ciudad que podía ser, no encuentro otro adjetivo bondadoso que, mejor.
Y pongo ejemplos, campo de fútbol, polideportivo de deportes (sirve para conciertos), plaza de toros (que se utiliza para deportes y galas), recinto ferial (que no se utiliza), Palacio de Congresos (que se usa com recinto ferial, como el Espolón), Soterramiento del trazado de ferrocarril, las desgracias acontecidas con Álamo, Escuelas Daniel Trevijano, Colegio Gonzalo de Berceo, reforma del paseo del Espolón, la Concha del Espolón (cómo añoro la Conti!) reforma de la Glorieta, parque del Ebro, Monte Cantabria, Centro histórico y su bombardeo, barrio de la judería (recuerdan a aquellos sesudos que fumaban en pipa?) Palacio del General, Palacio de Correos, Teatro Moderno, LO-20, Calle Gran Vía (qué aberración!!), Calle Bretón (pué poco ha aprendido de los errores de su hermana mayor paralela), Paseo de la cien ex-tiendas y miles de cámaras, edificios estrellados por las estrellas, Itos, Zaeras, Ábalos y demás firmamentos consentidos por los administradores, rancias peleas por mear y marcar el territorio (Palacio de Justicia, Monte Corvo, San Millán) cuando ese territorio no es de uno ni de otro sino de todos los ciudadanos, Hospital San Pedro, etc, etc, etc.
Y que la ciudad no sea lo que podía ser tiene responsables directos, los políticos, la prensa y los arquitectos e indirectos todos los que tragan con lo que se les eche.
Pues yo me paso del primer grupo al segundo al grito de "¡¡¡qué chorra más da!!!"

Y que San Agustín, con lo que el pobre lleva encima, "nos coja confesaos".